Recorridos virtuales: innovación del mercado inmobiliario post-Covid
Un día normal para hacer scouting de bienes raíces, por ejemplo en la búsqueda de departamentos en venta en Puebla de zona Angelópolis, consistía en un itinerario estratégico para llegar a tiempo a todos los puntos de visita, tomando en cuenta factores como la hora, la movilidad y el comportamiento del tráfico. Esa rutina cambió radicalmente después de la pandemia y, si bien al principio estuvo completamente paralizada, trajo consigo una aceleración en el proceso tecnológico que ya se venia construyendo: la incorporación de la realidad virtual y la visualización 360 al mercado inmobiliario.
El aislamiento fue una medida problemática para el mercado de bienes raíces, pues permeó la posibilidad de interacción directa del cliente con el inmueble. Aunque fue posible amortiguar un poco su impacto trasladando a las redes sociales la construcción del vinculo con el cliente, por desgracia, estos espacios tienen ciertas limitantes. Es decir, claro que la fotografía es una gran herramienta para que los compradores o inversores puedan ver, por ejemplo departamentos en venta en Puebla, pero para poder inspeccionar realmente cada área del inmueble y sus particularidades había que ir más allá.
Las imágenes son esenciales para el proceso de compraventa pues la permiten al usuario tener un adelanto de cómo se verá su nuevo hogar; sin embargo, por más calidad que tenga la fotografía, hay detalles que son imposibles de capturar. Afortunadamente, hoy en día la realidad virtual nos introduce a una nueva experiencia, mucho más fiel a los detalles; además de permitir la interacción a tres dimensiones. Esto hace que el usuario siente que está más informado y, por lo tanto, finalice la compra con más seguridad.
La realidad virtual permite mostrar un plano completo del espacio, sólo se requiere un área despejada y utilizar un visor que se coloca el usuario de manera muy sencilla, como si fueran unos lentes. Gracias a esta tecnología, el comprador puede desplazarse en el espacio recreado como si realmente estuviera ahí. Eso resulta esencial en el caso de los bienes raíces, para atender necesidades vitales de los compradores, como tener plena certeza de las dimensiones o la extensión de cada habitación y saber qué muebles podrían ir ahí. Esto hace que, desde el minuto uno, la experiencia lleve al comprador a sentir que ese espacio ya es suyo.
Otra herramienta que en el último año ha resultado muy útil en el ramo es la fotografía 360. Se trata de una foto fija que tiene profundidad y distintos ángulos que hacen posible una interacción mucho más dinámica. A través del control del mouse, un pad o las propias yemas de los dedos, el comprador puede dar zoom, expandir, disminuir o acercarse a cada uno de los rincones de una habitación. Si estas fotografías se “animan”, el comprador puede incluso desplazarse como si estuviera en el departamento (aunque de manera más limitada).
Esta última herramienta ha sido vital para nosotros en Grupo UNE, incluso era una tendencia que ya veíamos venir antes del COVID. Estamos seguros de que los recorridos virtuales para bienes inmuebles llegaron para quedarse, por eso trabajamos arduamente para ofrecer a los interesados una experiencia integral al visitar nuestros departamentos en venta en Puebla (zona Angelópolis). Ahora que necesitamos cuidarnos y resguardarnos hasta que la pandemia pase, los recorridos virtuales son nuestro as para la primera fase de compra, acercándote a cada rincón de los desarrollos con un solo click.
